LA CUEVA DEL ANDY, se enorgullece en presentar a su primera crítica invitada en estos dos años de funcionamiento y es nada menos que mi queridisima hermana del alma, Gina Baldivieso, que nos trae un blast form the past. Gracias por la primera colaboración manis, espero no sea la última!
Sólo a mí se me ocurre volver a ver la atroz versión de Disney de La Cenicienta, chorrocientosmil años después. Con tan bello motivo, ahora tengo algunas cositas qué decir al respecto:
- Nadie niega que sea positivo ser una persona trabajadora, humilde, sencilla y con voluntad, pero la actitud de Cenicienta ya raya en lo patético. ¿Qué es eso de suplicarle hasta al gato maligno ese para que no le haga sufrir? Estoy segura de que muchas niñas de mi generación permitieron que les hagan bullying por culpa de esta chica jajajaja Y sin duda, otras tantas pensaron que eran geniales y graciosas al comportarse como las odiosas hermanastras (que, por cierto, me hicieron recuerdo a varias malcriadas que tuve el infortunio de conocer).
- ¿Alguien sabe qué se llama el príncipe? Bueno, no importa, igual creo que hace una gran pareja con la Cenicienta, pues me parecen igualmente lebudos. Además de andar rehuyendo a sus obligaciones reales ( ) resultó un inútil completo que está vista a sus empleados para que le encuentren mujer y, encima, le ayuden a conservarla.
- No pude hacer más que reír ante la "infinita" voluntad que mostró este hombre sin nombre en su ridículo intento por impedir que el amor de su vida, a quien por cierto acababa de conocer, se le vaya de las manos cual arena. En serio, ¿cómo hizo para no poder alcanzar a una mujer que iba corriendo con tacones y que, encima, va y pierde uno en la huida?
- Mientras por un lado tenemos a una heroína llorona con una madrastra más amarga que la bilis y con un hada madrina súper despistada y medio amarreta, vemos que el padre de nuestro pasivo héroe no es otra cosa que un tiranillo que amenaza con decapitar al gran duque si éste no lograba que el menso de su hijo se case y le dé nietos, LPM Yo le habría mandado a buscarse una esposa propia y a tener más hijos por su cuenta para que nos deje en paz a todos. Pero en fin, supongo que tampoco se podría haber esperado más de una película de 1950!
- Para mí, lo mejorcito de la peli es la fauna, con excepción del gato Lucifer (en serio, ¿qué onda con Disney? ¿por qué en sus primeras pelis los gatos eran los malos?) En todo caso, amé al caballo, al perro y sobre todo a los ratones. Si las plaguitas que había en mi casa hubieran tenido la mitad de talento que esos bichos, en estos momentos tendría el emporio de la high couture, operado exitosamente por roedores (¿sería eso considerado como abuso animal? espero que no, yo les trataría bien siempre)
- Mientras yo me quedé con los animalitos, a mi pá, la dichosa Cenicienta le sirvió para establecer horarios de llegada a casa, pues aún resuena en mi cabecita su voz diciendo "Tienes permiso hasta tal hora, después tu carruaje se convertirá en calabaza", es decir, "o llegas temprano, o te haré puré" jajajajaja
Así pues, estas pelis de la infancia. Oooh, sí, como much@s, tengo grandes críticas hacia la mayoría de las susodichas princesas, sobre todo contra la Sirenita, que es una teenager odiosa que no dudó en poner en riesgo a su propio padre en su intento de salirse con la suya, pero me reservo el resto de mis darditos para otro día que vuelvan a pasar algún clásico por el Disney Channel
Gracias por publicarme, manito :D Sé que muchos fans de las princesas van a chillar cuando lean esto, pero es pues la opinión de una niña que nunca gustó de las "heroínas" caídas del catre que siempre están esperando a que las rescaten. Also, mis papás siempre me inculcaron el tener una visión propia y crítica de las cosas, sí, incluso de los dibujitos animados :D Yo también espero que no sea la primera ni última colaboración (y que no me den mucho palo por destrozar la infancia de algun@s con mi sincera opinión jajajaja)
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