FROZEN

¡Acaba de nevar en Beijing! Es menester que haga un review lleno de spoilers de Frozen

(a pedido de Alvaro y Andrea)

PARA EMPEZAR...

Todos aman Frozen. Sí no la amas, debes ser comunista o pedofílico o algo. Esta película, que ya es todo un fenómeno mundial, está inspirada en la historia de H. C. Andersens La Reina de Nieve, de una manera similar a como El Libro de la Selva de Disney se inspira en el libro de Kipling, es decir, no queda mucho de la historia original. Frozen trata de dos hermanas, Elsa y Anna, princesas del pequeño reino de Erindell (?). El paisaje está inspirado en Noruega, quizás Finlandia y tal vez un poco de Suiza, en una época que puede ir del 1600 al 1800. Es justo decir que los paisajes son preciosos y hechos con mucho amor al detalle. No puedo imaginar cómo alguna técnica de 2D podría capturar la esencia de la nieve de manera tan realista. Ah y Elsa tiene poderes de hielo. Sí, me olvidaba. Esto ocasiona un accidente con Anna cuando ambas son pequeñas, lo cual la obliga a recluirse por el resto de su vida, hasta el día de su coronación (tras la trágica muerte de sus padres, porque así trabaja Disney), durante la cual pierde el control, y se ve obligada a escapar, no sin antes envolver al reino en un invierno perpetuo. Anna, con la ayuda de Kristoff un trabajador del pueblo y Olaf, un muñeco de nieve animado por la magia de Elsa, van a buscarla. Cuidando el reino en la ausencia de ambas, se queda un príncipe vecino, Hans que le anda coqueteando a Anna.

PARA VER GLEE ME QUEDABA EN CASA...

Y sin embargo, ni bien empecé a ver esto, me di cuenta de que iba a tener ciertos problemas con Frozen. La película comienza con un coro acapella con tonos nativo americanos, y después de eso hay una canción de hombres rudos trabajando en la nieve, recolectando hielo para la época de verano. Y luego más y más canto y baile. Supongo que quejarse de la música en una película de Disney es cómo ir a comer churrasco y ser vegetariano, pero no me quejo por las canciones en sí, me quejo porque estas son innecesariamente largas, y a la mitad de cada una de ellas, deseaba que parasen y avancen con la trama. La historia es interesante y los personajes son lo suficientemente buenos cómo para que que nos interese lo que pasa, y cada momento que la peli malgastaba en canciones (especialmente la de los trolls, ugh) en lugar de avanzar la historia, me frustraba.

ELSA ES LO MÁXIMO, O BUENO, DEBIÓ HABERLO SIDO

Esto es especialmente notorio debido a que Elsa, es un excelente personaje que desgraciadamente, no desarrollan para nada. 

Y podrían ponerla haciendo otra cara en los posters

Ella es definitivamente el personaje más interesante y debería se la protagonista principal. Desgraciadamente, sólo es la antagonista, y Anna tiene mucho más tiempo de pantalla. Y la historia de Anna no es tan interesante como Elsa. Cuando ambas son niñas, Anna tiene el conflicto de vivir aburrida y relativamente solitaria al comienzo, tras perder a su hermana. Pero ¿Y Elsa? Elsa sufre terriblemente a lo largo de su corta vida, viéndose obligada a inhibir sus emociones, viviendo con la culpa de casi matar a su hermana, y recluirse, a fin de proteger Anna por el peligro de que su magia involucra. Es algo que podría explotarse de maneras maravillosas, y sin embargo, apenas vemos ese lado de la historia.

Especialmente frustrante es cómo parece que todo va a cambiar cuando Elsa se ​​transforma en la Reina de la Nieve mientras canta Let It Go. Se siente como un gran comienzo, un punto de partida para el personaje, para ver el inicio de su verdadera y emocionante historia  e identidad. Queremos verla crear más cosas con sus poderes, y que mande a su golem de Hielo a cazar lobos, los cuales come crudos (ya que el frío jamás la molestó realmente) y luego vaya a dormir a su acogedora camita de nieve muy blanda y que se yo que más cosas.

y A PESAR DE TODO, ME CAE BIEN ANNA

Pero en cambio, la película nos obliga a pasar tiempo Anna. Sí, Anna es encantadora y divertida, pero no es un personaje muy original, y ya hemos tenido miles de Annas a través de la filmografía de Disney. Su parte de la historia, viajando para encontrar a Elsa junto a su príncipe y su adorable mascota no es un viaje realmente original o interesante. Perdemos demasiado tiempo en su viaje, y con los trolls y su canción (odie esa parte), y para los 100 minutos que tenemos, eso es criminal.

MALDITO MUÑECO DE NIEVE

Otra cosa: Olaf. Pensé que iba a odiar a Olaf, el muñeco de nieve. Pero en realidad la actuación de Josh Gad lo hacen bastante agradable (su canción estaba innecesariamente larga, como las demás, pero irónicamente fue la que más me gustó). Pero ¿Por qué hacerlo andar con Anna? Una excelente forma de mostrarnos la forma de pensar de Elsa en el interior del palacio de hielo, hubiese sido tenerla junto a Olaf, tras crearlo. Eso es algo que nunca antes ha sucedido en una película de Disney, el que una princesa cree  a su propia mascota. Las interacciones de ambos podrían haber sido memorables, emulando un poco las escenas en La Bella y la Bestia con la servidumbre encantada.

WHAT A TWIST!

Supongo que al final, el que Hans sea un cretino tiene que ser un twist, pero me pareció medio obvio a decir la verdad. Creo que por que he leído demasiada fantasía medieval últimamente, pero ni bien Hans mencionó que era el décimo tercero en la línea de sucesión, dentro de mí dije, "ese wey anda buscando un matrimonio por conveniencia". A medida que la peli avanza y el único "villano" aparente que tenemos es ese vejete mal tipo del reino vecino que no es realmente amenazador, pues sí, me iba temiendo el que Hans iba a resultar ser un cretino. Y sí es un buen twist, y Hans hace un buen villano que es creíble y tiene una motivación para serlo. Lastimosamente, yo hubiese preferido que no lo sea. Así, le hubiesen dado a Anna dos hombres perfectamente decentes, entre los cuales tendría que decidir (enamorándose a primera vista de uno, y luego desarrollando sentimientos por el otro), viéndose luego en una situación adulta, de tener que escoger entre ambos. Hubiese sido arriesgado, y obviamente, Disney no corre riesgos. El que Hans sea un cretino es demasiado conveniente y perfecto para todos los involucrados en ese triangulo amoroso.

ELSA: MALA ONDA

El final se sintió muy apresurado y un tanto aguado. Sobre todo, quería, necesitaba que Elsa al final le explique a Anna el porqué de su alejamiento durante toda su vida, y el que no lo haya hecho me frustró aun más. Anna debería haber recibido esta información para entender el increíble sacrificio de Elsa, con el fin de tratar de mantener Anna a salvo. Sin esto, el final es completamente unilateral: se muestra las acciones de Anna y su heroísmo, pero no se reconoce que Elsa pasó su vida totalmente sola, renunciando a la compañía de su amada Anna que anhelaba, todo por el bien de otros. 

De haber sabido esto Anna, hubiese descubierto un significado más interesante en las palabras de Olaf, "El amor es anteponer las necesidades de otros por encima de las propias" y es exactamente lo que Elsa ha estado haciendo eso toda su vida. Y creo que esto habría hecho que Anna entienda los últimos 13 años de una manera completamente diferente, pero ya que por alguna extraña razón decidieron no hacerle decirlo, al final, asumo que Anna sigue pensando que su hermana es una cretina desamorada.

ELSA; SIN PRÍNCIPE QUE JOROBE

Ok, esto es una de las partes más controversiales de la película: Elsa, la princesa Disney no termina con un príncipe (Anna sí). Y fue lo que en parte, me hizo adorar la peli, muy al margen de todos los problemas que hallé. Sí tal cual, es la mejor parte de la peli a mi parecer. Hay quienes dicen que esto apoya la teoría de que Elsa es lesbiana (siendo sus poderes una metáfora de homosexualidad, que tiene que esconder, ya que ella nació de esa forma tipo X-Men). Creo saltar inmediatamente a sacar esa clase de conclusiones dice más sobre la mentalidad del público en general de lo que dice de la narrativa de Frozen. Viéndola, ni por un momento consideré que Elsa podría ser lesbiana, ni siquiera se me ocurrió que su sexualidad fuese algo que importase. ¿Realmente se pone la gente tan quisquillosa acerca de la sexualidad de los personajes, al punto de que cualquier desinterés en el sexo opuesto tenga que ser la señal de que es una nueva bandera del orgullo gay? No estoy diciendo que lo no sea o no deba serlo, por cierto. Fácilmente podría serlo y sería genial. Pero el que no se interese por ningún hombre en la peli no es una muestra de eso. Simplemente no tiene un interés romántico porque no lo tiene y punto. Al fin y al cabo tiene 18 años, y tiene toda una vida para encontrar una pareja con quien ser feliz para siempre. O no, y seguir siendo feliz para siempre.

¿Es tan difícil aceptar que una mujer no necesita un hombre en su vida para tener una vida feliz? ¿Acaso es mucho pedir que consideremos que una chica fuerte, independiente, reina de un imperio y con poderes de Hielo no es lesbiana simplemente porque no anda mendigandole amor a nadie?

Como digo, ame que la película no llenase ese espacio. Todas las películas de Disney siempre suelen pintar falsamente ese panorama de que nuestras vidas están incompletas hasta que encontramos a nuestra media naranja. Y eso es un mensaje horrendo, que ha creado generaciones enteras de adolescentes deprimidos que se aferran con uñas y dientes a la primera persona que les sonríe bonito (cómo Anna). Sí, hablando de eso, me gustó que desmientan ese cliché del amor a primera vista, con Hans. Fue satisfactorio. No tan satisfactorio luego de que se repitiera con Kristoff (osea no está bien enamorarse de alguien en un día, pero en dos sí, es perfectamente aceptable?), pero bueno.

Dicho todo eso y a pesar de la negatividad, me gustó mucho Frozen. Esperaba que hubiesen prestado un poco más de atención a su película del 2012 Wreck-it-Ralph, que mostró un verdadero desarrollo de personajes, momentos tiernos sin ser manipuladores y sobre todo cero canciones (las horrendas canciones de Shillex y Rihanna no cuentan). Pero al margen de eso, es una peli llena de grandes momentos, personajes y risas.

Siempre pueden subirle unos puntos si es que las canciones no les molestan o incluso las aman (la canción de los trolls sigue apestando)